Los maestros se niegan a retornar a clases presenciales el próximo año escolar por la falta de condiciones.
La mañana de este martes, 22 de junio, educadores cumaneses se congregaron en el sector La Copita para exigir el cumplimiento de sus derechos laborales, la celeridad en el proceso de vacunación contra el COVID-19, la rehabilitación de los planteles educativos y rechazar modificaciones que pretende realizar la Asamblea Nacional a la ley del ejercicio de la docencia.
El presidente del Sindicato Venezolano de Maestros en Sucre, William Figueroa, cuestionó que se pretenda «trastocar el quehacer educativo» con la presencia de la milicia venezolana y los consejos comunales como se prevee en la nueva ley del ejercicio de los trabajadores de la educación.
Figueroa también denunció el significativo deterioro del más del 94% de los colegios en el territorio sucrense y la no existencia de un plan de recuperación de estos espacios por parte del gobierno venezolano. Señaló la falta de óptimos servicios básicos como el agua, gas y electricidad en las diferentes instituciones, aunado al desvalijamiento sistemático de las escuelas en Cumaná, Carúpano, Araya y Chacopata.
Los profesionales de la educación exigieron sueldos y salarios que garanticen la alimentación y vestimenta de sus familias, el cumplimiento de los protocolos de bioseguridad en los centros educativos y la vacunación total de los docentes.
Se espera que el gremio retome las actividades de calle hasta lograr que las autoridades gubernamentales cumplan con sus requerimientos.