Las autoridades informaron que se han localizado restos del fuselaje en el mar y creen que no hay supervivientes del siniestro, que llevaba seis tripulantes y 22 pasajeros, entre ellos varios niños.
Los restos del avión que desapareció el martes con 28 personas a bordo, en la península de Kamchatka, en el extremo oriente de Rusia, fueron encontrados unos cinco kilómetros de la pista del aeropuerto de Palana, informó la agencia aerea rusa, Rosaviatsiya.
Las autoridades han localizado restos del fuselaje en la ladera de una montaña y también en el mar de Ojotsk. Los indicios muestran que el Antonov, que cubría una ruta de 700 kilómetros, se estrelló contra un acantilado, según comentó Serguéi Gorb, subdirector de la compañía aérea, que aseguró que el aparato se mantenía “en total conformidad con las normas de seguridad”.
El gobernador de Kamchatka, Vladímir Solodov, explicó en un comunicado que la hipótesis más probable es que el accidente ocurriese durante la aproximación para el aterrizaje con “poca visibilidad”, “Una parte del fuselaje fue encontrada en la orilla, la otra en el agua”, dijo el gobernador.
De acuerdo con los datos preliminares, ninguno de los pasajeros sobrevivió el accidente, según dijeron los servicios de emergencia a la agencia oficial RIA Nóvosti.
El avión, un Antonov An-26 de diseño soviético, volaba desde la capital de la región, Petropavlovsk-Kamchatsky, hacia a la pequeña ciudad de Palana cuando dejó de transmitir, dijo a la AFP Valentina Glazova, portavoz de la oficina del fiscal regional a cargo de transportes.
La mayoría de los pasajeros, incluida la jefa del gobierno local de Palana, Olga Mokhiriova, eran de Palana, una ciudad de menos de 3.000 habitantes.
