De acuerdo con el más reciente informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO, por sus siglas en inglés), la escasez de alimentos es una bomba de tiempo. Y es que el problema se intensificará por una población mundial creciente, suelos cada vez menos fértiles, una biodiversidad en declive y el cambio climático, reseñaron medios internacionales.
En ese sentido, el Secretario General de la ONU, António Guterres, convocó a la primera cumbre sobre sistemas alimentarios que se desarrollará a la par de la Asamblea General de la organización en Nueva York.
Según las cifras de la FAO, cerca del 10% de la población mundial, 811 millones de personas, está desnutrida, lo que supone un aumento de 118 millones con respecto a 2019, lo cual contrasta con la cifra de que un tercio de los alimentos producidos en el planeta acaba en la basura.
Entretanto, la responsable de alimentación sostenible de la FAO en México, Karina Sánchez alertó que la pandemia agravó las condiciones precarias en América Latina, ya que la cosecha en los campos de los agricultores se pudrieron porque se cerraron los puertos y las fronteras.
Además, precisó que el contraste es especialmente marcado en América Latina, pues pese a ser una de las regiones que más exporta comida, al menos 50 millones de personas están en desnutrición.
Según la FAO, América Latina no sólo no alcanzará el objetivo de hambre cero en 2030, sino que se prevé que incluso 20 millones más padecen hambre.